martes, 28 de agosto de 2012

LA VIOLENCIA SEXUAL: UN ASUNTO DE CASA


De acuerdo a las estadísticas del Instituto Colombiano de bienestar familiar (ICBF), en el país se triplicaron las denuncias de maltrato sexual  entre el año 2005 y 2010, al pasar de 2.969 a 9.009. Boyacá, siguiendo la tendencia nacional, pasó de 56 el año 2.005 a  156 denuncias en el 2010; teniendo un techo máximo de 220 en el 2009.  El Instituto clasifica dentro de la categoría maltrato sexual  el abuso sexual, acto sexual abusivo y el acceso carnal.







Para realizar un análisis comparativo de Boyacá en el contexto nacional, detengámonos en la relación del número de denuncias de maltrato sexual 2010 y la población DANE del mismo año.  Los resultados son alentadores, nuestro departamento  está dentro de los seis entes que registran un menor número de casos, con una tasa de 12.3 denuncias por cada cien mil habitantes; sin embargo surge el interrogante de si tal cifra obedece al silencio de las víctimas.
Dicha hipótesis toma fuerza cuando comparamos las cifras ICBF y los informes periciales sexológicos por presunto delito sexual que arroja el instituto nacional de medicina legal. Pese a los problemas metodológicos para confrontar los datos, de acuerdo a medicina legal el departamento ha ocupado durante los últimos seis años el décimo lugar en promedio, dentro de 33 entes que son consultados. Si excluimos los antiguos territorios nacionales, junto a Meta, Cundinamarca, Quindío y Casanare somos quienes registramos el mayor número de casos valorados por el instituto mencionado.

 
 Fuente: instituto de Medicina Legal
 

Del año 2005 al 2010, medicina legal ha valorado 4.216 casos por presunto delito sexual en Boyacá, donde 85,67% de los informes periciales se practicó a menores de edad y la mayoría a mujeres. Frente a los presuntos agresores surge otro hecho interesante, pero preocupante, dado que en la mayoría de los casos el agresor es algún miembro del círculo cercano a la persona valorada; de acuerdo a medicina legal, por ejemplo en el año 2009, en las categorías familia, pareja y amigos cercanos se concentra el 50,06% de los casos. El 23,86% de los casos registran como pre­sunto agresor algún conocido (Compañero de estu­dio, conocido de trabajo, profesores, encargados del menor, etc.). Tan solo el 20,20% de los casos registran como presunto agresor a algún desconocido así haya sido posible su identificación por parte de la persona valorado.

En el caso de Tunja, en los últimos 6 años se han valorado 536 casos por presunto delito sexual, siendo levemente superior la tasa de frecuencias de hechos en relación con el departamento. El comportamiento de las cifras en el periodo se caracteriza por un ligero crecimiento de los casos registrados, pero que deben mirarse con preocupación por parte del municipio y la ciudadanía. Frente a las demás capitales de departamento, la ciudad registrar 57 casos por cada cien mil habitantes, en el año 2010,  lo que la ubica dentro de las nueve ciudades capitales con mayor número de casos valorados por presunto delito sexual.






Resulta importante llamar la atención sobre dos fenómenos que se desprenden de las estadísticas de violencia sexual, por una parte la población objeto de las agresiones, es decir los menores de edad y las mujeres, lo cual resulta un hecho vergonzoso para una sociedad y segundo la violencia sexual en el interior de la familia y en la relación de pareja, lo cual agrava la situación de las víctimas de este flagelo, dadas las consecuencias particularmente destructoras por las relaciones de cercanía y lo que significa la familia para el desarrollo moral y humano de la sociedad.

Pese a los esfuerzos institucionales es necesario que la sociedad boyacense en su conjunto,  se imponga como reto erradicar la violencia sexual dadas las devastadoras consecuencias para la sociedad del futuro. Nosotros somos quienes construimos el Boyacá de las nuevas generaciones.

JACINTO PINEDA JIMÉNEZ. Docente ESAP Territorial Boyacá Casanare